El Colegio San Miguel de Nervión es un centro con valores que cuida hasta los mínimos detalles. Este es un ejemplo de ello.

La Srta. María, cada vez que se le cae un diente a un alumno, le pide que este lo lleve a la secretaría del cole, algo que hacen con toda ilusión, como si de un tesoro se tratara. Posteriormente, con todo amor y cariño, la profesora les pinta un sobre personalizado con una nota para recordarle al Ratoncito Pérez que tiene trabajo para esa noche, y que debe ponerle un pequeño regalo a cambio de llevarse su diente como la tradición nos dicta.

En definitiva, desde el colegio seguimos cuidando de cada alumno, manteniendo las ilusiones propias de los niños y las tradiciones de toda una vida, intentando que no se pierdan nunca.